Estoy en conato de fuga
contigo
como decirlo en fusión emotiva;
contesto comunicativa ferviente,
en desempeño de urdimbre y trama. Cuauht:
Flexibles
las ramas que ofrecen tus frutos
me entregan cautivas brindando su sombra;
las horas se alargan y en tanto el espacio
se mueren despacio en tanto me nombras.
Pat:
Siento tu concentración
multifacética
hay declaración en gorjeo y arrullo;
la amistad en fusión de géneros,
dos contexturas, un solo aliento. Cuauht:
Un solo
tiempo nos une ahora
tiene sustento por lo que entraña;
un solo puerto y una llegada
y aquel secreto que nos revela
… cuando lo callas.
Pat:
Tú hálito llega brisa
marina
estímulo de mis palabras en las tuyas,
surgen del preludio del universo,
la temperatura aumenta su vibración
reciproca la configuración cristalina;
Yo, tu, refractario y arcilla. Cuauht:
Hechos de
barro y un costilla son unitarios;
extraordinarios los relicarios de nuestro acervo;
de nuestro verbo son alegrías…;
….y alegorías de algo más serio.
Pat:
Correspondencia
acompasada,
que no sobre ni falte el cariño
expresión y señal trascendental,
y nos demos al experimento confluya real. Cuauht:
Se va
filtrando la luz del día por las ventanas,
por las mañana iluminadas se ven sonrientes;
y la vertientes de su energía cubren las noches
que en el silencio de su cobijo nos guardarán.
He atraído el mapa de
tus palabras
como imán atrae a su hierro,
aliento su vehemencia y encierro;
te recluyo en mi ternura interior.
Cuauht:
A poco más
que es muy serio lo que en natura se atrapa,
un laberinto de inercias, la gravedad de atracciones;
y una emulsión de emociones que se mueve al exterior.
Pat:
Hablaremos en secreto
confesionario,
no podremos resistir nuestro georama
reconciliación de la caricia necesaria;
entrecruce nos debemos asistir. Cuauht:
Si para
pronto insistir se derraman lo secretos,
no es necesario susurros ni tampoco lo discreto,
solo el vibrar de los ecos de la risa de los cuerpos.
Pat:
Todo se intimará bien
pensado,
se abren confines sin línea divisoria,
aficionados a un mismo territorio
giraremos sobre nuestro eje imaginario. Cuauht:
Un paralaje
ordinario se captura en dos visiones,
el territorio observado de la luna iluminada,
y aquella sombra velada que me enseña su otro lado.
Pat:
No olvidemos constancia
del emisario,
la distinción está en el mensaje,
y expresarse en exquisito camuflaje,
llenar de fanal nuestro geoestacionario.
Cuauht:
Códice,
código escrito; semiótica de un sentido,
esotérico sea inscrito lo que es misterio privado;
hermenéutica lacrada no requiere descifrado. Pat:
Todo se adornará y
vestirá de arrebato,
no existirá holganza ni distracción;
giros Tierra lunar en efluvio marino
dos polos en perfecta confabulación.
Cuauht:
Todo en el
cuerpo sucede en traslación y en inercia;
y la pulsión de emergencia se transforma crece y mueve;
y en comunión se conmueve; y en otros ocho resulta.
He llegado nuevamente a este lugar, la misma calle me recibe, las mismas tiendas de toda una vida, los viejos adoquines en la calzada siempre llaman poderosamente mi atención. Algunos árboles por aquí por allá dando calidez al paisaje. Camino, observo, me detengo, te busco con la mirada, recorriendo este lugar como si fuera mío. Me encuentro a gusto en este lugar será porque nadie me ve ni perciben que he vuelto. Lo malo que nunca he podido encontrarte, pero siento que sigo la huella, y estoy en el lugar donde habitas.
La calle se deja ver desnuda antes mis ojos que contemplo sin deseos de perder ningún detalle.
Esta oscureciendo y las luces de la calle poco a poco comienzan a encandecer.
Estoy sentada en uno de los bancos que están apostados en la calle principal de tu pueblo. Me gusta su estilo colonial, madera natural y fierro repujado en sus costados y cómodos como un recuerdo de antaño.
Calle de tus amores de aceras anchas, cómodas, tan antigua como mis sueños. Estoy en tu pueblo, donde vengo tras tus pasos y pienso que ellos se quedaron adoquinados en el magma del tiempo.
Trato de imaginar cuantas veces debes haber pasado por aquí, cuantos pasos de un lado a otro quedaron registrados todos estos años; quizás tantas veces como la lluvia se deja caer en el pueblo durante todo el año.
La luz resbala sobre la calle absorbiendo todos los reflejos de este amor, dando un tinte de blancura al lado izquierdo de la calle, mientras que la otra mitad se ve entre luz de realidad y sombra de la noche que no existe.
El cielo esta parcialmente nublado y estrellas escondidas entre nubes pasajeras se asoman majestuosas.
Es verano, pero no hace calor, ni tampoco frío. Las pocas personas que van caminando por esta avenida, van vestidas de añoranza; ajenos a mi presencia.
Recorro cada rincón de esta calle y observo un letrero azul con letras luminosas donde se lee: “SE BUSCA” La vitrina es mitad cristal, mitad arrebozada de tul blanco. Me da la impresión que fuera una tienda de antigüedades y fotografías en blanco y negro. La cámara de la memoria capta y registra momentos felices donde una vez degustamos las exquisiteces que la vida nos ofrecía. Siento hambre en el corazón y sed en el alma.
La boca saborea miel hecha tristeza. El aroma a recuerdo se delata y corre por la sangre.
Se respira un día que termina apaciblemente resignado. Los negocios de la calle están cerrados y a lo lejos la vista se va hacia la iglesia mayor al final de la calle, parte de su frontis iluminado por un farol. Las puertas de la iglesia abiertas de par en par. La cruz de mediano tamaño y enjuto contorno, resplandece al final de la torre, invitándome a entrar.
Poco a poco estoy quedando sola, pero eso no importa, estoy acompañada por la calle que te ve pasar a diario, y puedo ver tu perfil quedándose reflejado en sus vitrinas, donde tu mirada se vuela mecida por el viento en las hojas de los árboles y tu sonrisa sale complaciente a mi reencuentro besándome la mejilla.
Me regocijo absorbiendo el aura que dejas difuminada, cuando vas camino hacia la plaza mayor, para perderte detrás la puerta de sol, sin saber a donde vas.
Me siento reconfortada dejando caer sobre mí todos tus pensamientos, como gotas de lluvia y la esencia de tu energía me abraza con la tersura de un amor sin barreras.
Despierto y la hermosura de tu pueblo se disipa, volviéndome a la realidad que choca conmigo extrañada.
AUTOR: PATRICIA ARAYA
PRIMER PREMIO GANADOR DEL TERCER CONCURSO "JULIO ROMERO DE TORRES"
Narrativa. Venezuela 2009.
Mujer, moza, modelo, los colores del destino es nuestro, siento tu luz
detonando en mí. Estoy recibiendo halo de la creación, caigo en sintonía con
ella.
La seña asoma en tu sonrisa, oh, tu suave voz, me siento viva en tu universo;
estamos reunidos en un lecho de estrellas y firmamento, atraídos por luz y
sombra. Me has dejado bosquejo sobre el lienzo.
Te envuelvo en la caricia venida desde infinito, llega divina la pincelada. Un
desnudo torso va naciendo de mi trazo. Te estoy sintiendo, deseando cristalizar
tu piel morena, dibujando e imaginando tus caderas. Todos los colores sobre tu
naturaleza sensual. He iluminado tu rostro y he acentuado una mirada triste.
Recibo tu caricia subyugadora, soy tu modelo, moza, mujer, desnuda en un mar de
silencio, sin máscaras ni disfraz. Mi ser apareciendo desde la oscuridad. De
cara al amor, manceba de tu imaginación. Siempre esperando, con la mirada en la
puerta, donde has de llegar.
Es imprescindible descubrir tu volumen y forma perfecta…amándote, me libero
enardecido
En mi universo y en nuestro naranjal describiré tu beso lascivo bajo su sombra
protectora y el frescor de tus palabras estará rondándome en el huerto. Todo
confabulado en el trazo de tu mano. Ya viva en la tela, fuente de inspiración
me dejo cautivar
Tú esencia fijada en la imaginación ahora concebida, retocando por aquí, por
acá, así, plasmada te he liberado de mi sombra
La naturaleza hizo su reclamo estaba descrito la fruta fresca siempre en mi
regazo, en estrecha distancia con mi piel, dibujada en los colores del amor; en
mis contornos y en mi cuerpo la magia haciendo su llamado.
Sigo el trazo fielmente, la espátula deidad homogénea; en la paleta el arco
iris contemplando la belleza en todo su origen. Bienvenida al mundo musa de mis
delirios.
Estoy contigo aferrada a tu dedo creador. Luz en mis ojos. Mi cuerpo atrayendo
tu mano sobre mis limones, los colores danzando en las naranjas, y en mi aura
van los azahares al viento. Somos dos almas unidas en un momento fecundo.
Cojo tus manos mujer y bebo de sus cuencas mágicas, delirante, deseoso. Te
beso, te descubro plétora de enigmas, transparente el misterio, impregnada del
limonar de mis sueños, convencido de mi propio secreto.
Mi efluvio marino, estoy aquí, soy ave en alas de tu ave. Tu boca se abre al
numen creador, me dejo caer en tus olas, atravesando en el tiempo la
permanencia de tu soplo
Yo, dejo sobre tu piel la huella impresa reclamándote eternamente mía, por
siempre mía… Julio Romero de Torres
Camino en el centro de mi conciencia, equilibrada en los sentimientos. Mi
figura revela los días de la esencia en libertad. Estoy arrastrando el velo de
la vida. Mi vestido es simbólico, aunque visual su textura y el gesto de mi
cuerpo.
Respiro profundamente, y mientras lo hago, imagino toda la tensión de mi vida
se conecte con mis pies. Tomo un segundo para respirar profundo e imagino todos
los extremos de mi cuerpo comienzan a elevarse. Estoy flotando; mi cabeza
centrada en mi respiración, en el palpitar de mi corazón.
Imagino un cordón transparente, conecta mi sensibilidad con el corazón del
universo. Estoy entrando en la realeza de la paz. Fluye en mí su amor, su
riqueza queda flotando en los latidos, en el reino de mi existencia. Puedo
sentir su caricia subyugadora, se mueve en abundancia, absorta y divina en mi
entorno. Ella enjoya su alma en la mía. Me quedo en contemplación de su caudal
creadora. Yo, sólo puedo maravillarme con ella, llegar a la ciudad más próxima
para compartir su venero.
El sol sobre mi cabeza, el horizonte se divisa cristalino. Me doy cuenta, fui
dibujando el camino más sencillo a su costa y de pronto todos los barcos desbaratados
de mi existencia quedaron volteados mirando al cielo. Yo continúo mi camino en
resonancia.
Recuerdo la primera impresiónel día nuestros caminos se juntaron, fue tan preciso el momento, tan como predestinado que me parece increíble que haya sucedido así como sucedió. Yo iba por la calle de prisa a casa, en mis manos llevaba un libro y dentro de este, las cartas había escrito a mi padre contándole los últimos acontecimientos de mi año escolar. El libro se desprendió de mis manos como un pájarosediento de libertad y ahí estabas tu tan buen mozo, con una mirada penetrante viniendo de tus ojos negros. Ambos en cuclillas recogiendo las cartas; tu sonriente diciendo, ¡cuantas cartas de amor, como quisiera ser yo el afortunado! Tímidamente explicaba eran para mi padre, tu escuchando conmucha atención.
Fue una sorpresa habíamos estado en el mismo liceo los últimos tres años sin nunca habernos encontrado antes. La fecha de nuestras respectivas fiestas de graduación se venía encima, sin tener consorte ni dama para la fiesta de gala.
Ese encuentro marcaría el comienzo de una vida juntos. En la fiesta nos dimos cuenta que el amor florecía.
Los recuerdos regresan ahora a ese momento y te vuelvo a ver con esa hermosa mascarilla que tendría por discurrir, tú igualmente efusivo buscando interpretar en algunos de mis gestos quien era, y porque no nos habíamos encontrado antes.
Era nuestro primera cita y nada podía presagiar los acontecimientos se vendrían sobre nuestras vidas. El baile no se hizo esperar y tu te mostrabas reflexivo a ratos, otros divertido, serio y también nos encontrábamos tímidamente mirándonos a los ojos.
Me sentía contenta, y en un momento llegue a escuchar una voz me decía que tu eras el hombre de mi vida.
En la puerta de mi casa cuando nos despedíamos nos dimos cuenta que nos habíamos confidenciado nuestras procedencias y hubo tal algarabía que mi tía Abby había escuchado nuestras voces hablar, reírnos, haciéndonos silenciar por lo tarde que era. Yo te dejaba saber que había llegado desde Israel a los once años a vivir USA,dejando atrás a mi padre. Tu por tu parte decías habías venido a vivir con unos familiares a al edad denueve, dejando también a tu padre en Cisjordania. Éramos circunstancialmente enemigos. Nos reímos, pero en ningún momento sentimos que lo éramos. Estábamos ya tantos años en un país libre, en paz que nos parecía todo tan lejano; excepto que aun teníamos nuestros seres queridos en la zona del conflicto.
Amor mío creo que todo se volvía más incrédulo cuando mi padre decía conocer al tuyo, y daba los detalles de lo ocurrido. Por tu parte tu recordabas a tu viejo llegar contando historias de un amigo inseparable del otro lado de la frontera, un Israelita, y eso te daba un temor que no pudiste olvidar.
Nuestros padres se habían conocido durante la guerra mas cruenta entre Israelíes y Palestinos, y por esas cosas de la vida a ambos les gustaba beber vino, y la cantina en la frontera no se hacia esperar y dentro habían creado una amistad que sobrepasaba las barreras del odio, la guerra, y habían hecho un pacto de hermanos. Ellos soñaron en sus tertulias, vivir libre, en paz, y en el amor de la hermandad. Mi padre contaba que se iban hasta la puerta del bar abrazado, cantando y al pasar al otro lado, ya afuera, se desprendían el uno del otro en lágrimas, prometiendo nunca disparar el uno en contra del otro.
Aquí estamos amor mío, con tres hijos, y una nieta maravillosa viviendo un sueño que nuestros padres jamás pudieron ver posible.
Mi querido Hamit, no me arrepiento de nada solo fuimos cómplices de haber vivido en Amor y Paz. Los momentos tristes son saber que no podremos caminar por la tierra que nos vio nacer ni llegar hasta la tumba de nuestros padres; pero si rezar, ver que la paz es posible si solo pudiéramos soñar y amar y que ese amor traspasara todas las fronteras posibles como lo hicieron nuestros padres que nos trastoco la vida nuestra por siempre.
Amor mío no me equivoque en escuchar mi voz y en este momento que escribo, vuelve tu rostro como la primera vez, incrédula de lo que me estaba pasando, nunca llevaste máscara alguna,pues aun percibo tu imagen antigua con la nitidez de un amor insoslayable.
Tuya, Nahali
Patricia Araya
He Nacido: Have Been Born
He Nacido:
He nacido en el jardín de la creación donde la rosa fue mi madre donde la raíz fue una estrella.
He aprendido a caminar en el universo, donde las reglas las puso la existencia donde el juez final, es la muerte.
Me he dejado plantar semilla, en la inmensidad del amor donde el milagro ha nacido.
He visto crecer la vida vertiginosa, donde se quedo prendida en un segundo donde la memoria del tiempo me persigue.
He aquí brillando con luz propia donde voy alumbrando con luz de luna donde soy reminiscencia de mi padre sol.
He dejado huella como lucero donde van orbitándome todos mis pasos donde mi descendencia va tras mi universo.
He nacido creada a semejanza soy árbol destino en constante evolución en sus hojas va descrito mi espíritu.
He perdurado en el jardín de la creación donde en toda su esencia y en toda su magnitud el verbo se hizo voz, llamándome “MUJER”
I have been born:
I have been born in the garden of the creation where a rose was my mother where my roots were from a star.
I have learned to walk in the universe, where the rules were made by existence where the final judge is death.
I have let myself plant a seed, in the immensity of love where a miracle has been born
I have seen life grow vertiginous, where it remained caught in a second where the memory of time stalks me
I have been here shining with my own light where I’m illuminating myself with moon light here, I’m reminiscencing of my father sun.
I have left a trail like a morning star where they're orbiting my steps after me where my descendants go after my universe.
I have been born created in image. I am a tree of destiny in constant evolution on my leaves are written pages of my spirit.
I have lasted in the garden of the creation where in all its essence and all its magnitude the verb was spoken, calling me a “WOMAN”
Tu silencio ha dejado huellas como el agua dibujó carne viva en la montaña, cae torrentoso calando mis profundidades es cascada en blanco, sombra y dolor cayendo desde la cima altanera hasta el ruedo de mis pasos simples, mientras solo puedo contemplar un caballo negro reluciente, altivo solitario, pastando, alimentándose sobre mis anhelos envejecidos. Tu silencio ha dejado huellas sombrea el paisaje como nube pasajera mis recuerdos envueltos en musgo, regados gota a gota por la humedad de una mirada lánguida sin saber tu silencio ha dejado huellas se arraiga cansado en mi piel reseca por el tiempo
PLANTEMOS POESIA, PLANTEMOS CUENTOS, PLANTEMOS AMOR POR NUESTRO PLANETA TIERRA
Vista de La Herradura, Coquimbo, Chile
If we did not take great pains to corrupt our nature, our nature would never corrupt us.__Clarendon
Mi Paisaje
Playa Changa, Coquimbo, Chile
Nature is the living, visible garment of God.__ Goethe.
AÑAÑUCA: Flor Nacional de Coquimbo
Añañuca Entre puñados de rocas diseminadas y pintadas por el tiempo. Arena de cabellos rubio, deslizándose al compás del viento. Entre rocas de colores y cordillera blanca; aparece por aquí, por allá, ella hermosa, finísima, de tímido mirar, detrás de cada peñasco como escondida, aún llorando. Sus labios carmesí susurrando palabras de amor que se van quedando enredadas en el pelillo y en las algas. ¡No llores mas, dice el cactus, hasta cuando! Una vez llegó al pueblo, un sureño de corazón, venia con poco dinero pero con una carreta llena de ilusión. Cansado venia, pero cantando. Tras su sueño venia, y llegando. Añañuca, una joven del pueblo, al verlo tan re buen mozo del él se fue enamorando, y el joven a ésta no perdió el tiempo cortejando. ¡Vamos casando nos, iba diciéndole a su hija, el padre! Fiesta de ramada cantada con tonada y cueca; entre vigüela, acordeón, y guitarra. La fiesta se fue armando. Bailaron y cantaron, y entre chicha y vino tinto; los novios arrullándose. Dos tortolitos a luna de miel yéndose. Su joven esposo se levanto de su cama, una mañana, dando un salto. Añañuca dijo: el sueño más hermoso y más re- grande “he soñado que el oro que vine a buscar me esta esperando” Añañuca se quedaba en lo alto de la cima, con su mano en alto, muchos besos de su boca al viento lanzando. A su esposo, desierto vio tragándolo. Los días pasaban, pasaban, la verde pradera en amarillo se iba tornando. Los suspiros de Añañuca prontos en Azulinas flores iban quedando. Su esposo se fue en busca de su sueño. El desierto tenía en su camino su reflejo incierto. Pasaron dos veranos dos inviernos. Añañuca enmudeció primero, luego cayo derrumbada al suelo, triste y sin aliento. Todos la lloraron. Añañuca había muerto. Pueblo entero bajando de los cerros. La dejaban en la misma cima donde vio a su amor por último. La pira de piedras fue regada por la lluvia que caía desde cielo inmenso. Al siguiente día todo el lugar enteramente florido de una hermosa flor roja, el pueblo asombrado le llamó “flor de Añañuca" Por: Patricia M. Araya http://www.portalcoquimbo.cl/?1573
Hill and valley, seas and constellations, are but stereotypes of divine ideas appealing to, and answered by the living soul of a man._E.H. Chapin